jueves, 9 de febrero de 2012

Un metro bajo tierra.

Esta otra canción (también nació canción), simple, torpe incluso, se asomó mientras volvía en colectivo del Hospital Piñero.


Ay, ay, ay, ay, ay
Vos no soltaste a la bestia
La bestia estaba suelta ya.
Podés oírme tal vez
Un metro bajo tierra.

Me dijo que me quiere
Que sin mí se muere
que de tanto amarme
los celos lo torturan
y estallan con violencia
en su cabeza.

Dulces palabras manipuladoras
No las oigas, por favor, no las oigas.

Un poco de culpa tengo
No estaba lista su cena
No era lo que quería
Y él viene con tantos problemas
Con tanto cansancio
Y yo estorbando
Con mi torpeza.

Duras palabras manipuladoras
No las oigas, por favor, no las oigas.

Que lo provoco con mi ropa
Lo enojo con mi arreglo
Que los celos lo enceguecen
Si me miran.
Mi familia, mis amigos,
No lo quieren.

Mentirosas palabras manipuladoras
No las oigas, por favor, no las oigas.

Ay, ay, ay, ay, ay
Vos no soltaste a la bestia
La bestia estaba suelta ya
Agazapada esperó
Ver una puerta abierta.

Ay, ay, ay, ay, ay
Vos no soltaste a la bestia
La bestia estaba suelta ya
Podés oírme tal vez
Un metro bajo tierra.


Malva Gris / gadsy
08 de febrero de 2012

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