lunes, 5 de noviembre de 2012

Azar y voluntad.

Nadie es inocente.
Incluso cada uno es a su manera
un conspirador
un traidor
un héroe.
Quién que no ha creído en algo,
no ha intentado (aun fútilmente)
convencer
iluminar
contribuir
con artilugios
o gestas incomprendidas
trampas descubiertas
condenadas incluso
demonizadas.
Quién no ha intentado
alguna vez
la manipulación
ocultando lo inconveniente
lo dudoso
postergarlo secretamente
improvisar o planear mentiras.
Quién no ha guardado esos secretos.
Quién no ha comprendido la estrategia del otro
y la ha protegido
o por el contrario,
no ha intentado denunciarla
con rumores o a voces
a las personas correctas
o equivocadas.
Nadie es inocente.
Todos somos conspiradores
inexpertos casi siempre
efectivos casi nunca.
Por eso no creemos en las conspiraciones
de los que realmente son eficaces en el engaño.
¿Son mejores acaso ellos que nosotros
que toda la vida mentimos con suerte dispar,
en el arte del engaño y la estrategia?
Nosotros que planeamos nuestra vida
desde niños
y fracasamos.
Que no pudimos sostener nuestros sueños
y los malvendimos.
O acaso nos convencimos
de que los sueños verdaderos eran otros.
O que los sueños son para los niños.
¿Cómo podrían trazar planes
y cumplirlos implacables
si nosotros fallamos en los ideales
en los que nos iba la vida
la felicidad
el destino?
Sostenidos por mentiras
inútiles intentos de reencaminar el destino.
(Necesarias para que ese destino sea).
Nadie es inocente.
No importa qué hagamos
el destino es eso que resulta
del azar y de la voluntad.
A veces ocurre una consecuencia
y no alguna otra cosa.
Otras estalla como una provocación
lo inesperado.
Como si fuera un azar conciente de su arbitrio
y nosotros marionetas pretensiosas
remedando la danza del titiritero.
Aunque todos seamos tiriteros
además
de nuestra marioneta
la que hacemos actuar
bailar
y poner la piel y los huesos en juego,
y como en una gran subasta
imponerse a los otros
conspirando
como héroes o traidores
a una multitud de destinos,
como una trama desordenada
asimétrica
mutante.
Nadie es inocente.
Cómo engañarse
y sostenerlo.
 
gadsy / Malva Gris

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